El Reverendo Padre Don Francisco de Paula Roldan Jurado, Párroco de San José y Director Espiritual de la Hermandad de Nuestro Padre Jesús en la Oración en el Huerto ha predicado el Triduo Cuaresmal al titular de la corporación del Miércoles Santo.
El jueves 5 de marzo daba comienzo los Cultos en la residencia canónica de la Hermandad, la Parroquia San José y que se ha extendido durante los siguientes dos días, viernes y sábado, donde han sido muchos los hermanos y vecinos que han querido acompañar al Señor en la Oración en el Huerto en su Triduo.
La Venerada Imagen en un magnifico altar de cultos, presidia el mismo, ante una parte de la candeleria del paso de palio de María Santísima del Amor que colocada con excelente estilo y cariño por parte del equipo de mayordomía que daba luz al Señor, ocupando un lateral del Templo, junto a dos respiraderos de plata y un dosel sostenido por dos varales del paso de palio, junto a ello el exorno floral y el estandarte de la corporación del Miércoles Santo.
Galería de Imágenes de Alfredo Jesús Sánchez Toro
A la conclusión del Solemne Triduo y en los salones parroquiales tuvo lugar el acto de presentación del cartel de la Semana Santa que realiza el grupo joven de esta Hermandad «AMOR Y ORACIÓN 2.015» .
En el acto se reconoció el trabajo realizado por D. Jesús Asencio, autor de la obra del cartel.
Fotografías de Facebook del grupo joven:
PALABRAS DE PRESENTACIÓN DEL CARTEL «AMOR Y ORACIÓN 2.015 «.
“Padre, si quieres, aparta de mí este cáliz; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya. Se le apareció un ángel del cielo que le confortaba. Lleno de angustia, oraba con más instancia; y sudó como gruesas gotas de sangre, que corrían hasta la tierra”. (Lc 22, 42-44)
Con el alma “doloría”
A su padre, Jesús oraba;
gotas de sangre sudaba,
y en su amarga agonía
un Ángel le consolaba.
Fue por la primavera. El olivar se detenía
en la clara madrugada.
Jesús oraba y gemía
A Dios desde la tierra ensangrentada.
Buenas noches a todos:
En primer lugar, quiero agradecer a la Junta de Gobierno de mi querida Hermandad por concederme la oportunidad de rezarle al Señor y de haceros un llamamiento a través de estas palabras.
Tras haber sido protagonista del cartel oficial del Grupo Joven de nuestra Hermandad, el pasado año 2014, nuestra Amantísima Titular María Santísima del Amor y del Rosario en sus Misterios Dolorosos, este año,
según lo establecido, ocupa su lugar como anunciador de la Semana Santa nuestro Padre Jesús de la Oración en el Huerto, que, más bien es una proclama del acontecimiento religioso más aguardado en los calendarios año tras año.
Nos encontramos ante un Misterio que, poco a poco, va cerrando fases para llegar a ser uno de los más bellos de nuestra ciudad. Un Misterio rico en momentos a la hora de plasmarlo fotográficamente, ya sea en el barrio, en su ida o vuelta, en la plaza de la Iglesia, en San Pío…
La fotografía elegida está realizada en el culmen de la Carrera Oficial, concretamente en la Plaza de la Iglesia, el pasado Miércoles Santo, en los compases más esperados de su estación de penitencia. Parece que esa plaza se hace partícipe de la escena, con una iluminación que nos hace mirar al Señor y contemplar su belleza, una belleza que sufre.
El cartel representa un mensaje sencillo, al mismo tiempo que permite detenerse para admirar el arte y profundizar en su dolor.
El fotógrafo, Jesús Asencio Pérez, junto con el trabajo realizado por la gran calidad de profesionales de este ámbito, hace propia nuestra Semana Santa para mostrar ciudad y carácter, La Línea y religiosidad, sabiendo alcanzar también en este cartel el hecho captado. Ha sabido recoger en imagen lo que supone el motivo de la devoción y el cariño de un barrio humilde y linense, formado por muchas personas, entre ellas mis abuelos maternos, Emiliano y Adela, el gran motivo de esta gran locura que siento a lo largo de todo el año, los que supieron sembrar en mí esa semillita cofrade, sin olvidarme tampoco de esos grandes lazos de unión que tengo con hermanos
cofrades o compañeros de locura. Se muestra el hijo de una Reina que se luce cada
Miércoles Santo con el sonido de un coqueteo entre rosarios y varales, perfumados por el aroma del incienso, contemplados por el Sol y la Luna y acompañados de esas notas musicales que nos encogen el corazón y en ese mismo instante nos preguntamos: ¿Por qué no se para el tiempo?
“Aparta de mí este cáliz”. Cáliz tan importante en este momento de la Pasión. Simboliza ofrecerlo todo, que contempla que Él tenía que morir para que nosotros tuviéramos la reconciliación con Dios, pura expresión de Amor al Padre, de Amor a nosotros, un Amor vivo.
“Aparta de mí este cáliz”. En este tiempo de Cuaresma, tiempo de preparación para la Pascua mediante la oración, el ayuno y la entrega al prójimo, tiempo de conversión para volver a Dios Padre Misericordioso.
Al igual que el Papa Francisco a través de su mensaje, nos invita a fortalecer nuestros corazones por medio del ayuno, ayuno de juzgar a otros, ayuno de palabras hirientes, ayuno de descontentos, enojos, pesimismos, quejarse de amargura… Ayuno de todo lo que separe de Jesús.
Aquí veremos a Jesús librando la batalla definitiva contra el pecado. Esto nos lleva a preguntarnos: ¿No se podría haber evitado un episodio tan doloroso de su vida? Pero a lo largo del tiempo vemos que fue en Getsemaní donde Él tomó la decisión de ir a la Cruz. A lo largo de la próxima Semana Grande, de las próximas chicotás, veremos otro año más su Calvario y recordaremos una vez más que no existe muestra más grande de afecto hacia nosotros: el morir por amor.
San José es la parigüela
de un bello paso,
que cruza en trabajaderas,
por sus calles, plazas y por su barrio.
Huele a Pasión y devoción de primavera.
Huele a azahar y a chicotá campanillera.
El olivo es testigo
de la escena del Señor,
San José, barrio humilde y bendito,
de mi Cristo de la Oración.
Muchas gracias.
María Vilches Sánchez
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